La bala que le causó la muerte al conductor entró por el vidrio parabrisas y lo impactó la frente haciendo que muriera de manera inmediata. Así lo reseña el diario La Región.
Una bala que entró por el vidrio parabrisas de su vehículo, segó la vida de Jhoncys Andris Torres Mundaray, de 43 años de edad. Luego de tocar corneta insistentemente para que avanzara, algunos conductores se aproximaron al vehículo y lo vieron muerto. El tráfico era denso en la vía que conduce al El Junquito la noche del martes.
En el asiento del conductor quedó el cuerpo de Jhoncys Torres, reclinado hacia el volante. Llevaba unos audífonos puestos con los que escuchaba música para entretenerse en la cola y su teléfono celular en la mano. Su familia cree que eso le impidió escuchar los disparos, cuando motorizados se batieron a tiros en plena vía. Quizás habría tenido tiempo de buscar resguardo.
La bala que le causó la muerte al conductor entró por el vidrio parabrisas y lo impactó la frente. La muerte le llegó al instante, sin que nadie pudiera hacer algo para buscar ayuda. El técnico en instalación de antenas repetidoras iba camino a la vivienda donde vivía con su tío, en el kilómetro 12 de El Junquito.
Comisiones de la División contra Homicidios del Cicpc acudieron al sitio para buscar el cuerpo. El asesinato agudizó la tranca habitual para la hora en ambos sentidos. Algunos testigos dijeron que los tiros se produjeron en medio de la cola y que era un enfrentamiento entre motorizados. Eran aproximadamente las 8:15 de la noche. Eduardo Mindaray, tío de la víctima contó que un vecino que iba dos carros de por medio al de su sobrino en la misma cola fue quien al reconocerlo llamó a la familia. El carro fue impactato por tres disparos.
La empresa familia donde laboraba la víctima se encuentra en Altamira, pero ocasionalmente tenía que viajar por el interior del país haciendo las instalaciones. Estaba separado de su esposa y sus tres hijos vivían con ella en Maturín, estado Monagas. Angel Mundaray, tío del técnico dijo que a los venezolanos “nos están matando. Están matando a muchos jóvenes, destruyendo a nuestro país y los políticos lo que hacen es llenarse la boca. Esto se queda impune. Cuando le pregunté a los del Cicpc que iba a pasar con este caso de mi sobrino, me dijeron que era un muerto más”, comentó. Aseguró que a Jhoncys Torres era un hombre tranquilo, trabajador que no tomaba licor y no tenía vicios.
Otro de sus tíos con quien vivía, de nombre Ángel Mundaray, se preguntó ¿hasta cuándo va a estar este gobierno con esta inseguridad?, ¿Hasta cuándo vamos a seguir con esta matazón?. Mundaray contó que cuando salió de declarar en el Cicpc y se dirigía a su residencia en el kilómetro 12 de El Junquito, se encontró con la cola por el asesinato de otra persona, vecino de la zona a quien mataron para robarle el carro.