Se irá nadando desde Cuba hasta Estados Unidos

La nadadora australiana Chloe McCardel emprenderá el miércoles un intento de cruzar los 170 km que separan a Cuba de Estados Unidos, “un gran desafío” que espera vencer “aproximadamente en 60 horas”, sin la protección de una jaula antitiburones.
Nadadora australiana espera cruzar el estrecho de Florida en unas “60 horas”

“Pienso que me tomará aproximadamente unas 60 horas hacer el viaje”, dijo en rueda de prensa McCardel, de 28 años y quien se lanzará al mar hacia las 10H00 locales (14H00 GMT) del miércoles desde el Club Náutico Internacional Hemingway, en el oeste de La Habana.





McCardel, quien conquistó en dos ocasiones (2011 y 2012) la copa Sotiraki, de la Channel Swimming Association, otorgada a la mujer que cruzó más rápido el Canal de la Mancha, entre Gran Bretaña y Francia, explicó que tiene “tres razones” para enfrentar ese “gran desafío”.

“En primer lugar, porque (cruzar el estrecho de Florida) es un récord mundial. Es un 50% más que la distancia más larga nadada hasta ahora por un nadador”, y “la segunda es que quiero alentar una gran relación de amistad entre Cuba y Estados Unidos, y mostrarle al mundo qué bonitos son el país (la isla) y su gente”.

“La tercera razón es también muy importante. Lo voy a hacer contra el cáncer”, apuntó la nadadora, tras señalar que su madre superó un cáncer de mama cuando ella tenía 14 años y que tiene la “aspiración de ayudar a todos los que padecen esta enfermedad”.

McCardel confirmó que hará el recorrido sin usar una jaula antitiburoes y que utilizará como únicas indumentarias su bañador –no usará traje de neopreno ni aletas–, un gorro de goma y anteojos de baño.

Cubrirá su cuerpo con una grasa para protegerse del sol y del frío y se alimentará “cada 30 minutos con una comida líquida especial, preparada con vitaminas y minerales”.

Si logra su difícil cometido, McCardel establecerá un nuevo récord mundial en natación de larga distancia sin asistencia y sin escalas, superando a la británica-australiana Penny Palfrey, quien nadó 108 kilómetros en este propio estrecho en 2011.

Varias nadadoras han intentado completar infructuosamente esa distancia. La más reciente fue la estadounidense Diana Nyad, de 63 años, quien abandonó a principios de año la travesía a la mitad, debido a tormentas, hipotermia y medusas.

La también australiana Susan Maroney es la primera y única persona que ha logrado cruzar el estrecho de Florida. Logró su hazaña en 1997 cuando tenía 22 años, pero lo hizo protegida por una jaula.

AFP