Venezolanos buscan alternativas para obtener ingresos adicionales

Venezolanos buscan alternativas para obtener ingresos adicionales

Carmen Violeta Carrasquel, junto con su hija y asistente confecciona desde organizadores para guardar objetos, bolsas de zapatos y hasta artículos para viajes | Foto: William Dumont

En Caracas proliferan carteles que cubren postes o paredes de la capital, en los que se ofrecen servicios que van desde tareas dirigidas hasta peluqueras a domicilio o agencias de fiestas informales. “Trabajar por cuenta propia se ha traducido en una manera de llevar el sustento a casa. A veces sucede cuando se cierran las demás puertas y en otros casos para buscar ingresos adicionales por la inflación”, afirmó Leonardo Morán, que en familia prepara alimentos para fiestas.

Luis Carías Toscano/El Nacional





Sus únicos medios publicitarios fueron los carteles pegados en puntos céntricos de la capital y las redes sociales. Morán mantiene su hogar con este negocio y gana cerca de 3.500 bolívares por fiesta organizada

Gerardo Al Poveda, coordinador general de la Asociación de Trabajadores Autónomos, Emprendedores y Microempresarios, explicó que a muchos empleados del sector formal no les alcanza el sueldo para subsistir y buscan alternativas en un ingreso adicional ante el alza de los precios. La mayoría de las actividades son a domicilio y surgen básicamente por la falta de empleos formales.

Una de las razones para que las personas busquen opciones laborales es la caída del poder adquisitivo, que según el economista Asdrúbal Rivas se ha deteriorado 9,33% entre enero y septiembre de este año, con base en datos del Banco Central de Venezuela. Calcula que cerrará 2013 con una caída de 11,25%. En estos nueve meses la inflación subió 38,7%. Desde septiembre del año pasado, rubros como alimentos han aumentado 67,3%; restaurantes y hoteles 56%; bebidas alcohólicas 54%; transporte 46,9% y vestido y calzado 46,8%, de acuerdo con el instituto emisor.

Francis Sevilla es economista del BCV, pero para tener un ingreso adicional da clases particulares de inglés a domicilio. “No hay un presupuesto dividido para los dos trabajos. Sirven para cancelar la tarjeta de crédito o los gastos del hogar por igual”.

En sus clases suele cobrar 200 bolívares por hora y aunque varía de mes a mes, en promedio gana 2.000 bolívares, pues depende de la cantidad de alumnos que en muchas ocasiones se acercan por tener algún examen fijado.

Para gastos básicos. Patricia Narváez es peluquera. Pasó tres meses desempleada después de una mala experiencia laboral, hasta que un cliente le dijo que le gustaba su trabajo y le pidió ir hasta su casa para cortarle el cabello. “Se me ocurrió buscar mis anteriores clientes y ofrecerles el servicio. Es mi trabajo, mi forma de ganarme la vida”, contó.

Con su negocio a domicilio obtiene entre 2.500 y 3.000 bolívares mensuales que apenas le alcanzan para cubrir los gastos en medicamentos. Su hijo, que es abogado, la ayuda con los demás gastos de la casa.

Vicente Carias, secretario de organización de la Federación de Trabajadores No Dependientes, señaló que la economía informal la integra todo tipo de trabajadores, que abarca desde la reparación de relojes, computadoras y celulares hasta plomería. “Son personas que constantemente necesitan innovar. Si comenzaron con una pequeña tabla lo buscan ampliar a un carrito”.

Otros desarrollan modalidades originales de negocio como Carmen Violeta Carrasquel que, junto con su hija y una asistente, elabora organizadores para guardar objetos, que incluyen desde bolsas de zapatos hasta el maquillaje, prendas o artículos para viajes. “Todo empezó con un recuerdo para un bautizo. Eran bolsos de tela con encajes. Luego vinieron las primeras pruebas y después comenzamos a hacerle publicidad. Son piezas que van desde 60 bolívares”, indicó.

Con este trabajo gana mensualmente cerca de 5.000 bolívares, pero en diciembre alcanza hasta 30.000 bolívares, de los cuales 2.000 son para la asistente y el resto se divide entre madre e hija para los gastos más básicos. “Soy arquitecto de profesión, así que es un ingreso extra que sirve para alimentos o medicinas”.

Cifras del Instituto Nacional de Estadística señalan que el número de personas que estaba en la informalidad para agosto ascendía a 5.342.390: 41,2% del total de la población económicamente activa. Alfredo Padilla, presidente del Movimiento de Defensa del Patrimonio calcula que 30% trabaja por cuenta propia y que la mayoría no cancela impuestos municipales. Lo demás corresponde a empresas con menos de 5 personas o el buhonerismo, según el INE.

“El trabajo por cuenta propia también ha encontrado dificultades para desarrollarse como el resto de la economía”, dijo Francisco Moya, que hace 30 años comenzó a hacer café, pero luego empezó a elaborar bolsas y vender ropa.

“Es imposible tener un puesto en un mercado porque genera pérdidas. Están los impuestos, los costos de concesión por un espacio que han subido 1.000% desde hace 15 años. Se eliminó la autogestión y ahora siempre hay amenazas políticas de los consejos comunales”, agregó.

1.133.674 desempleados

Las cifras del Instituto Nacional de Estadística indican que el desempleo se situó en 8% al cierre de agosto, un total de 1.133.674 personas, 77.216 más que las reportadas en julio, cuando 1.056.458 integraban el universo de desocupados.

Las estadísticas también muestran que el desempleo entre las personas de 15 a 24 años de edad duplica la tasa promedio nacional, pues se encontraba en 17,5%, un total de 411.736 cesantes.

La situación es diferente con otras categorías de edades. Por ejemplo, la desocupación en las personas entre 25 y 44 años fue de 7,3%, incluso por debajo del promedio nacional.