Lester Toledo: Maracaibo a oscuras

Lester Toledo: Maracaibo a oscuras

Algunos posiblemente no recuerden que la historia formal de la electricidad en Venezuela comienza en 1888 en Maracaibo. El 24 de octubre de ese año se inauguró el alumbrado público, convirtiéndose nuestra ciudad en la primera de  Venezuela en contar con iluminación eléctrica pública.

Los titilantes candiles de barro, con kerosene o aceite de coco, fueron sustituidos por rudimentarios postes con tenues bombillas que sin embargo llenaron de luz y orgullo a nuestra incipiente urbe nocturnal. Años después, en 1940, es Enelven la empresa responsable de este sistema eléctrico, logrando niveles de eficiencia y suministro impecables, lo que le otorgó para entonces el reconocimiento como el mejor servicio público del país.

Pero llegó la revolución y con ello el decaimiento de este servicio. Primero cambiaron el nombre y paralelamente se integraron el clientelismo, la desprofesionalización y la corrupción, deviniendo esto en el abandonado sistema eléctrico del país.





Pero no quiero referirme hoy a los apagones y multas de los cuales he hablado y combatido como legislador en el CLEZ. Quiero hablarles del drama que vive la primera ciudad oscura de Venezuela. La pésima administración de Corpoelec y la negligente gestión de Arias Cárdenas, corresponsable de los desastres del Gobierno nacional, mantienen a Maracaibo en una penumbra nocturna, que por supuesto propicia el delito y otros problemas sociales.

Salga usted querido lector a recorrer la ciudad de noche. Pase por 5 de Julio, por Haticos, por Delicias. Pase por El Marite o recorra Palito Blanco. De no ser por las luces de los vehículos y la publicidad de algunos locales comerciales o vallas, esta ciudad sería una cueva de lobos.

El artículo 31 numeral 10 de la nueva Ley Orga?nica del Sistema y Servicio Ele?ctrico, reza que es obligación de Corpoelec “Velar por la operacio?n, mantenimiento y expansio?n del alumbrado pu?blico a nivel nacional”. Está clara entonces esta responsabilidad que no es de nadie más.

Lo ilógico es que cada Alcaldía del país le cancela a Corpoelec el mantenimiento del alumbrado público de calles, avenidas, plazas y parques. El costo incluye desde el servicio eléctrico hasta la sustitución de los focos.
Por ello como diputado hago esta denuncia y llamo la atención del Gobernador del estado, quien es el garante de la responsabilidad que tienen los organismos nacionales en la región para que solicite a Corpoelec la reposición de las luminarias de la ciudad.

No podemos seguir viviendo en tinieblas Sr. Arias Cárdenas, dándole pie a los delincuentes que aprovechan esta deficiencia lumínica en Maracaibo. El Consejo Legislativo también debe citar a Corpoelec y pedir que rinda cuentas de esta situación. Maracaibo no merece vivir a oscuras. La historia nos dice todo lo contrario.

 

@LesterToledo