ALTO
LA LENTITUD: Converso con un funcionario de alta confianza en el alto gobierno. Le pregunto sobre el paso de tortuga que lleva el dialogo siendo que el gobierno es quien debe tomar las medidas acordadas y no la oposición que no está en poder.
Mientras me aseguraba que Simonovis si saldría bajo medida humanitaria me pide que entienda lo difícil que es tomar cualquier decisión en el gobierno: “Comprende que antes teníamos un líder único quien ordenaba y todo se cumplía. Nadie se atrevía a discreparle una acción por errada que fuera.
MEDIO
VIEJA DEUDA: Cuando el lunes un grupo de militares que participó activamente en los golpes de estado del 4 de Febrero y del 27 de Noviembre de 1992 contra el gobierno constitucional del presidente Carlos Andrés Pérez manifestaron frente al Palacio Presidencial de Miraflores -precisamente uno de los lugares por ellos atacado en esa intentona que fue derrotada por sus colegas de uniforme- quiero recordarle a mis consecuentes lectores que el pasado 13 de agosto de 2013 escribí sobre la molestia que ese grupo de ex oficiales y sub-oficiales venía incubando desde hace varios años.
Un punto de cuenta del entonces ministro de la Defensa, el general Henri Rangel Silva -hoy gobernador del estado Trujillo- presentado al presidente Hugo Chávez fue aprobado por el mandatario donde se le reconocía la reincorporación a las fuerzas armadas para disfrutar de todos los beneficios que les habían sido conculcados tras el alzamiento de ya hace 22 años. La protesta por la que el presidente Nicolás Maduro ordenó no sólo la represión con bombas lacrimógenas y perdigones -de la misma forma que han venido reprimiendo a los estudiantes desde el mes de febrero- sino la detención de algunos manifestantes incluyendo a su abogado defensor.
Aquí la nota que incluimos en los Runrunes de ese día y en nuestra web: ¿GOLPISTAS TODOS?: El 3 de febrero de 2012 era ministro de la Defensa y hoy es gobernador de Trujillo, Henry Rangel Silva, recomendó al entonces enfermo mandatario que tomara una acción decidida para reconocer a 62 oficiales y suboficiales que participaron en los golpes de Estado del 4F y 27N de 1992 contra el presidente constitucional Carlos Andrés Pérez, de los cuales 13 cayeron en esas acciones y uno murió de cáncer el 2010.
BAJO
SOPITA: Muchas veces he repetido que los jefes de “la revolución que se robo hasta la ilusión” no me perdonan ni a mí ni a otros periodistas que les descubramos las mentiras y contemos las verdades que nos quieren ocultar. En mi caso tienen una obsesión con descubrir las fuentes que me informaban veraz y oportunamente en torno a la enfermedad del caudillo. Me han atacado, demandado, citado como testigo a la fiscalía, amenazado de diferentes formas hasta la saciedad. Desde el vilipendio y el hackeo de mis correos hasta los recordados ataques de los coprófagos televisivos. Mas reciente, en 2013 el propio Maduro en dos cadenas me relacionó con la CIA.
Pedí que entregaran y mostraran las pruebas y hasta hoy nada. Ayer de nuevo volvieron al ataque personal cuando montaron el show del golpe lento. El nuevo montaje de ayer se la encargaron al alcalde caraqueño quien dijo: “Tenemos un correo electrónico del señor Whitaker escribiéndole al señor Nelson Bocaranda Sardi dándole órdenes acerca de qué debía poner y qué no debía poner en su columna llamada Runrunes, diciéndole que parara un poquito la mecha en las alusiones que hacía sobre la enfermedad de nuestro comandante Hugo Chávez, porque el régimen lo podía descubrir”. Y siguió “es decir el señor Whitaker dándole órdenes a un periodista venezolano acerca de qué publicar y que no publicar y cuando publicar, ¿eso lo sabía el departamento de Estado, eso lo sabía la señora Jacobson?, son preguntas que acuciosos periodistas podrían tratar de desentrañar”.
Nelson Bocaranda
Lea los Runrunes completos aquí