“No hay punto”. Este es el anuncio que aparece en las vitrinas de algunos negocios. Diez letras en una hoja tipo carta con la que se encuentran los residentes de la frontera al entrar a la mayoría de los establecimientos comerciales que laboran dentro de la zona limítrofe, problema que se vive a diario en San Antonio del Táchira, al igual que en Ureña. Una crisis que resta a muchos de los trabajadores a la hora de realizar la cancelación de los pagos para cosas tan sencillas como un almuerzo, donde la mayoría de los comercios exige el efectivo por la falta del elemento de débito. Richard Quiñonez/ Diario Los Andes
La presidenta de la Cámara de Comercio de San Antonio del Táchira, Isabel Castillo, explicó que tras una investigación “se ha encontrado déficit de estos dispositivos colocados por las entidades bancarias, ya que estos dispositivos son importados y las entidades bancarias esperan la entrega para suministrarlos a los comercios”.
Castillo, remarcó la situación que afrontan algunos establecimientos ante los cortes “sorpresivos de luz, lo que hace que aunque tú tengas el dispositivo, no lo puedes colocar en funcionamiento por la falta del suministro eléctrico en horas laborales”.
Colas en los cajeros
Al menos 17 cajeros automáticos funcionan en el municipio Bolívar, de los cuales tres dispensan dinero constantemente. La situación se torna preocupante para aquellos que residen en el municipio Pedro María Ureña, puesto que en la segunda entidad limítrofe al menos 5 cajeros se encuentran en el área, de los cuales dos funcionan correctamente.
La opción de muchos de los trabajadores, quienes reciben el pago a través de depósitos o transferencias, se encuentra tras retirar al menos 1.200,00 bolívares, lo que permite el cajero electrónico en muchos de los casos, pero ¿qué sucede cuando se debe pagar un monto superior?, se preguntan.
Tras una investigación en el municipio Pedro María Ureña, se pudo observar que al menos un local trabaja con el sobre débito de dinero, tras el pago de una comisión, lo que se resume al pago de al menos 20% de lo que se resta a través del punto, un recurso que no es el más correcto, pero contribuye a la rapidez del retiro de efectivo ante urgencias o necesidades.
Tras entrevistar a algunos comercios que sí contaban con punto de venta, se pudo observar que muchos de estos no admitían el pago de cuentas a través de tarjetas de crédito, a lo que no daban respuesta tras cuestionarles sobre el porqué de la negativa. Mientras que en otros establecimientos encargados de la venta de comida, se encontró que la mayoría de estos no reciben pago a través de los beneficios de la tarjeta alimenticia.