Vanessa Friedman: El diálogo y la UNIDAD

Vanessa Friedman: El diálogo y la UNIDAD

thumbnailVanessaFriedmanQuiero invitarlos a compartir mi análisis sobre la UNIDAD, específicamente en el caso de la MUD. Admitiéndome una de sus seguidoras más críticas he sido particularmente incisiva al analizar sus decisiones en cada fase, pero siempre he votado por ella.

La UNIDAD comenzó con la Coordinadora Democrática. Podría decirse eso, si por UNIDAD entendemos una plataforma organizada, con procesos definidos y unidad de propósito.

Pero hubo UNIDAD mucho antes, entorno a candidatos presidenciales, porque el principal objetivo, por lógica y por instinto de supervivencia, fue a cohesionarnos desprendidos de nuestras ambiciones individuales, persiguiendo un interés común: VENCER LA AMENAZA.





En realidad, la amenaza tenía una sola manera de entenderse: la pérdida de nuestras libertades democráticas. Por eso nos unimos por Arias Càrdenas, tan temprano como 1999; también nos unimos en la Coordinadora Democrática en el 2002, en un encuentro de amplia base con vitalidad y movilización de dimensiones históricas; nos unimos de nuevo en el 2006 para la elección presidencial con la candidatura de Manuel Rosales, luego Partidos Políticos y Movimiento Estudiantil se unieron para enfrentar la Enmienda Constitucional del 2007, y en el 2008 con el Acuerdo de Unidad Nacional, precursor de la Mesa de Unidad Democrática, fuimos de nuevo UNIDAD; esta vez ordenada, por peso partidista, exclusivamente electorera, sin la participación de las fuerzas vivas de la sociedad civil.

Seguimos siendo UNIDAD para la elección de un candidato unitario para postular a la Presidencia en el año 2012, con la muerte de Chávez en el 2013 sostuvimos UNIDAD y candidato, y en estos momentos bizarros sostenemos UNIDAD ante las tácticas escurridizas y traicioneras de un gobierno que lucha por ganar tiempo, para ver si con suerte… yo diría más bien con un milagro, logra permanecer en el poder.

Lo que quiero es llamar la atención en cuanto a algunos de sus factores: 1) ha habido y habrá UNIDAD mientras haya amenaza, 2) la UNIDAD nace para un candidato único, aunque no sea siempre el mismo, 3) la
UNIDAD ha sido y seguirá siendo plural y deliberativa, 4) la UNIDAD se expresa en una visión compartida de las circunstancias, sea presidenciales, Referéndums, parlamentarias o regionales, nunca una visión única, pero si una visión compartida.

He elegido como los mejores momentos de la UNIDAD los siguientes: A) El 2002 con la Coordinadora Democrática, porque su amplia base, mesas interdisciplinarias, alcance nacional, minorías activas y bien representadas permitieron un desempeño heterogéneo pero contundente. Mujeres de Rosado, Mujeres de Negro, Movimiento 1011, Gremios y Colegios Profesionales, todos los Partidos Políticos y sus Juventudes constituían frentes de acción distintos pero simultáneos. B) El 2007 con el Movimiento Estudiantil, porque su pluralidad, irreverencia y diversidad lograron defender los principios democráticos que se encontraban amenazados por la enmienda constitucional. Las principales casas de estudio, en todo el país, organizadas en Asambleas Regionales Estudiantiles, y movilizadas por facultad, Juventudes de Partidos, Cámaras Empresariales y Partidos Políticos cada uno con su agenda, pero siempre con el mismo propósito. C) Primer trimestre del 2016, fue un momento fenomenal la UNIDAD se complementó con un Poder Autónomo, como el legislativo, quien presentó sus vías para deponer el gobierno actual a través de sus prerrogativas constitucionales: enmienda constitucional y abandono del cargo, al que se sumó la base ADeca, pero simultáneamente PJ proponía un Referendo Revocatorio y María Corina y Voluntad Popular ya traían desde el 2014 el planteamiento de una Constituyente. El gobierno estaba rodeado, perdido, desesperanzado, y peligrosamente desesperado.

Todas nuestras victorias, cada momento estelar de la UNIDAD se ha caracterizado por tener múltiples frentes de batalla. El mejor momento de la MUD lo vivió a principios de este año, y muestra vestigios de retomar la misma ruta si se permite abrir distintos frentes concomitantes a la mesa de diálogo. No somos una visión única, pero si somos un mismo propósito y ese es el de anticipar las elecciones presidenciales.

El diálogo no puede paralizar nuestra esencia natural, el activismo político. Detener el activismo político es como pedirnos que aguantemos la respiración hasta culminar un esfuerzo que no necesariamente garantiza buenos resultados; aunque el Vaticano tenga las mejores intenciones.

Dos cosas pido, una a mi querida UNIDAD, multipliquemos nuestro alcance, impulsemos las acciones simultáneas, todas las salidas propuestas como nos aseguraron en marzo del 2016, y tengamos al bate nuestro candidato único. No esperen, el país lo necesita. La otra la pido al Nuncio. Creo que es injusto que su Excelencia, Monseñor Emil Paul Tscherrig, Nuncio Apostólico de Argentina, nos pida aguantar la respiración. Querido Padre, haga su mejor esfuerzo por ayudarnos en medio de esta tragedia, pero en el camino déjenos respirar.