Desde 1998 cuando ganó Chávez hasta el día de hoy, han sido tantas las denuncias y los escándalos por corrupción que han caracterizado los gobierno del insepulto y de Nicolás Maduro, incluyendo la desaparición de las reservas internacionales en oro, que nadie sabe donde están, bueno que apelamos a aquella famosas frase
brasilera o portuguesa “ pare du sufrir”.
“Llegamos al llegadero”, un año cumplió la Asamblea Nacional de haber sido recuperada y por mayoría absoluta, pero el gobierno violando la constitución, y todas las normas que rigen la democracia, han sido violadas, echadas a un lado y tiradas al pipote de la basura.
Todas las libertades individuales, y derechos ciudadanos han sido violados como el derecho a la salud, algo tan grave, en un país petrolero y rico como Venezuela, que se convirtió en el patio de atrás de Suramérica.
¿Será que los chavistas, maduristas o quienes se encuentran al frente del Estado no tienen familiares?; ¿no sufren de enfermedades?, porque hasta los médicos cubanos han huido del país, buscando mejores condiciones de vida.
Una vez visite con un amigo uno de esos llamados CDI en Puerto Ordaz, le di la cola en mi carro, y lo esperé: le dieron unos masajes, lo trataron, y me pidieron el favor de llevarlos a San Félix, a un barrio de gente humilde, donde tenían alquilada una casita ocho de estos médicos, o mejor dicho técnicos, entre todos hacían una colecta para comer, porque apenas les pagaban un sueldo mínimo, mientras los Castro le quitaban por cada técnico al gobierno de Chávez treinta mil dólares mensuales.
La revolución del siglo XXI en Guayana y en todo el país, ha significado el incremento de la pobreza, la miseria y de la criminalidad también, como la decadencia de los servicios médicos públicos.
Las empresas básicas de Guayana, solo sirvieron para aumentar el gasto burocrático del gobierno, con nominas súper abultadas, baja producción, politizadas, donde lo que mas destaca es la caída de la producción en todos los rubros.
Si se llegara a cuantificar la verdadera inversión hecha por los gobiernos rojo-rojitos, en todos estos años, entre lo presupuestado y ejecutado, un gentío tendría que ir a la cárcel por corrupción y apropiación indebida de dineros del Estado.
Pero el tema de la salud es muy grave, la carencia de medicinas, con un gobierno que rechaza las ayudas internacionales, cuando ni siquiera intenta abrir las puertas para que fluyan las medicinas necesarias para enfermos de todo tipo.
Para cerrar, creo que el genocidio forma parte de los crímenes a los cuales se debe imputar a quienes están al frente del gobierno de turno, por su negligencia, y rechazo a la entrada a Venezuela de medicinas.
Humberto Martí Espina
Comunicador Social
CNP: 4.094