Para el secretario de organización de la Asociación Civil Unidad y Cambio en el estado Bolívar, Juan José Pérez, Venezuela entró en su quinto año consecutivo de recesión económica, lo que significa la profundización de la escasez de alimentos y de una hiperinflación que acentuará la devaluación del salario.
Nota de prensa
Estamos en “modo de sobrevivencia” por un gobierno que nos ha condenado a morir de mengua, por una crisis que agrava la escasez de alimentos, medicinas y no deja de pulverizar el poder adquisitivo de los venezolanos, afirmó el dirigente y economista.
Pérez señaló que el país transita en su tercer mes de hiperinflación con el agravante de un desabastecimiento general, y el continuo empobrecimiento de los venezolanos.
Aseguró que la revolución se convirtió en el peor cáncer para los venezolanos.
Venezuela tiene una economía que está en quiebra, así como el venezolano de a pie, el trabajador y el funcionario público, cuyos salarios no alcanza para comprar un cartón de huevos, afirmó este economista.
En este sentido, enfatizó en el drama que viven millones de familias que a cada hora ven mermadas sus quincenas, y su presupuesto familiar reducido a polvo.
Advirtió que la crisis se acrecienta, y la migración de venezolanos a otros países, al igual que la deserción escolar, de la que responsabiliza al gobierno madurista.
El plan macabro de este gobierno forajido es tener un pueblo sin educación, un pueblo sin ningún grado de instrucción escolar, que depende de una bolsa o caja Clap, para consolidar en mayor grado su fracasada revolución.
Señaló como en las escuelas públicas o bolivarianas se eliminó el suministro de almuerzo escolar, o sencillamente se redujo a sólo un pedazo de papa o arroz pelao.
Pérez afirmó que si a Nicolás Maduro y todo su gabinete le importa el pueblo habrían renunciado desde hace mucho tiempo, por haber desangrado la economía del país, y habernos sometido a una crisis humanitaria sin precedente alguno en Venezuela. “La ambición de poder este gobierno está por encima de las necesidades del pueblo, quien muere de hambre y de mengua por culpa de una política corrupta, hambreadora y chantajista, que pretende a través del carnet de la patria y las bolsas CLAP, poner un bozal de arepa a los venezolanos”.
Para finalizar señaló que la convocatoria a elecciones presidenciales para el próximo 22 de abril es un mecanismo de desesperación del gobierno. “No podemos permitir que nuestro espíritu de lucha decaiga o, caigamos en la operación sicológica revolucionaria”, dijo.