Enrique Viloria Vera: Socialistas de siglo XXI ¿Gracias por favores recibidos?

Enrique Viloria Vera: Socialistas de siglo XXI ¿Gracias por favores recibidos?

No los perdones Señor,

porque sí saben lo que hacen,





Enrique Gracia Trinidad

Durante más de dos largas décadas, los súbditos bolivarianos hemos sido dolientes y aporreados testigos de la progresiva, alevosa, deliberada, planeada y asesorada por el castro –  comunismo-, destrucción de lo edificado en democracia, por unas generaciones de venezolanos – con sus errores y aciertos -, que, a lo largo de cuatro décadas, batallaron para edificar y consolidar, un país para querer, ahora para sufrir.

Han sido años de estupefacción y pena contemplando, impotentes y arrechos, como un país boyante, moderno, orgulloso de sí y de su industria petrolera de talla mundial, ahora exporta muy poco, casi nada: unos comprometidos barriles de petróleo y los escasos productos refinados que unas mal mantenidas y exhaustas refinerías alcanzan a producir. Lo que sí exportamos – por millones -, son venezolanos hambrientos, inseguros, enfermos, desempleados, aunque confiados en construir un futuro no socialista en los atiborrados países de hasta ahora solidaria acogida…aunque todo tiene su necesario y justo límite.

En su más abyecta locura, los socialistas del siglo XXI han despilfarrado, regalado, robado, expoliado, los más ingentes recursos públicos con que ha contado el hasta ahora rico país, sus reservas internacionales, a fin de disfrutarlos a placer, en lujosos palacetes italianos, áticos madrileños, apartamentos de alto standing en las ciudades del Imperio, villas, fincas y chalets que son la envidia de la comunidad, sin olvidar aviones y yates, relojes y joyas, caballos pura sangre, carros de marca, y los más osados adquiriendo  obras de arte recomendadas por expertos aprovechadores de la ignorancia socialista. Vía redes sociales, columnas en aporrea.com o en diarios afectos al socialismo, se acusan mutuamente de ser ladrones, corruptos, malversadores, nepotistas, clientelistas, y sobre todo, de traidores del pensamiento y obra de ese otro Hijo de Dios en la tierra, quien no predicaba amor sino odio, y amenazaba a sus enemigos no en darles la otra mejilla, sino de pulverizarlos para convertirlos en polvo cósmico; en fin, con el Mahatma recordemos :Allí donde hay amor, hay vida, el odio conduce a la destrucción.

Cada quien que juzgue las gratitudes que la nomenklatura, la cúpula socialista del siglo XXI cree merecer, en el entendido de que ellos no llegaron al poder para hacer un buen gobierno…sino la revolución…y enriquecerse impunemente.

Havel, el experimentado conocedor de las tropelías del comunismo, disfrazado acá – como inocente bomba mata bobos -, de Socialismo del siglo XXI, afirmó:

 La primera pequeña mentira que se contó en nombre de la verdad, la primera pequeña injusticia que se cometió en nombre de la justicia, la primera minúscula inmoralidad en nombre de la moral, siempre significarán el seguro camino del fin.