El Departamento de Transporte del Condado Miami-Dade está a punto de concretar un acuerdo financiado con impuestos fiscales que llevaría una nueva línea de ferrocarril a las líneas urbanas donde en la actualidad corren los trenes de Brightline, en tanto se debaten planes sobre en qué lugares se deben construir las estaciones entre Miami y Aventura.
Por: Sur Florida
En un memorando que envió esta semana, el alcalde del Condado Miami-Dade, Carlos Giménez, presentó el proyecto de un tren que ofrecería viajes cada 30 minutos entresemana, un servicio que no sería tan frecuente como el del Metrorail, pero estaría cerca de la espera de entre 20 y 30 minutos del Tri-Rail que ya funciona entre el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) y West Palm Beach.
El acuerdo pendiente tiene lugar tras largos meses de discusiones luego de una enconada reacción por parte de los comisionados y de Giménez ante una propuesta de Brightline para construir una ruta de cinco estaciones, cuya edificación le podría costar al contribuyente $350 millones, y hasta $80 millones anuales una vez empiece a funcionar.
El memorando de Giménez no reveló cifras de costo actualizadas, que podrían incluir gastos de trabajo, y de alquiler para tener acceso a las líneas férreas que usaba Brightline en sus trenes antes de cerrarse en marzo cuando comenzó la crisis del coronavirus.
Por el momento, Tri-Rail sigue oficialmente con posibilidades. A principios de este mes, el Departamento de Transporte del Condado Miami-Dade solicitó una propuesta de costo que presentaría ante los comisionados del condado el 20 de octubre. “Tiene sentido que seamos nosotros quienes lo manejen”, dijo Víctor García, portavoz de la Autoridad Regional de Transporte del Sur de la Florida, la entidad que administra el Tri-Rail. “Al menos, eso es lo que esperamos”.