Este jueves se realizó una movilización en la Ciudad de Buenos Aires para exigir justicia ante el caso de la joven venezolana quien sufrió abuso sexual y fue violada durante una entrevista laboral por parte de Irineo Humberto Garzón, quien era el dueño del establecimiento.
La indignación de la comunidad venezolana en Argentina y de quienes se han solidarizado con la joven migrante comenzó luego que la Juez, Karina Zucconi, concediera un beneficio procesal a Garzón para ser juzgado en libertad, luego de ser encontrado cometiendo el delito en flagrancia, ya que la misma consideró existía falta de elementos y el imputado no poseía antecedentes penales para ser privado de libertad.
Ante el reclamo de la familia de la víctima, diferentes organizaciones de la sociedad civil organizaron una movilización desde el local donde acontecieron los hechos en el barrio porteño de Once hasta la sede de la Suprema Corte de Justicia, donde estuvieron los coordinadores de Vente Argentina Adriana Flores y Miguel Ángel Martínez, exigiendo justicia y no se den beneficios a los criminales.
También, diversos voceros de Vente Venezuela se han pronunciado ante el hecho
La Diputada Dignora Hernández aseveró en sus redes sociales: “Hoy elevamos nuevamente nuestra voz. Estamos con cada Venezolano que dentro y fuera de nuestras fronteras exige respeto por sus DDHH. Exigimos justicia!”
Por su parte el Diputado Carlos Bastardo señaló que: “Este crimen no puede quedar impune, nos unimos a la exigencia de los ciudadanos venezolanos y argentinos que rechazan tal atrocidad y reclaman justicia en el caso de #GarzonViolador”.
Adicionalmente el Diputado Argentino Álvaro de Lamadrid acompañó el reclamo de la comunidad venezolana y criticó el accionar de la justicia: “La justicia Kirchnerista encierra víctimas y da beneficios a criminales, libera presos y apaña delincuentes y violadores. La jueza Karina Zucconi dejó libre a quién violó en flagrancia a una joven venezolana” detalló.
Finalmente, Adriana Flores de Vente Argentina declaró: “Huimos de un contexto muy difícil producto de una crisis humanitaria para poder vivir decentemente en otros países. El agresor se aprovechó de la vulnerabilidad de nuestra paisana por estar lejos de su hogar y pensar que estaba sola, lo que pone sobre la mesa el riesgo al que estamos expuestas como mujeres migrantes en el ámbito laboral”.
Nota de Prensa
