¿Por qué una bruja fue clave para la caída de alias “Matamba”?

¿Por qué una bruja fue clave para la caída de alias “Matamba”?

Lugar donde fue dado de baja alias ‘Matamba’, en el departamento de Santander. – Foto: Policía

 

Juan Larinson Castro Estupiñán, alias Matamba, era un curtido delincuente, difícil de cazar y con un poder corruptor demostrado, tanto que se voló dos veces de la cárcel. En sus 25 años de trayectoria criminal, inició siendo reclutado por las Farc y también se les voló, para entrar a formar parte de las autodefensas. Con el tiempo montó su propia organización, la Cordillera Sur, que operaba en Nariño, donde nació. En esos años de vida criminal siempre contó con el apoyo de una bruja que él consideraba que lo protegía, pero, según información de inteligencia, fue por ese mismo camino que cayó.

Por semana.com





Matamba no era un objetivo desconocido, en mayo de 2021 había sido capturado por un grupo élite de la Policía en Floridablanca, Santander, que le seguía los pasos y conocía sus costumbres. Por eso, el director de la Policía, general Jorge Luis Vargas, dispuso de buena parte de esos hombres para reiniciar la búsqueda de Matamba, luego de que se voló de la cárcel La Picota, al cruzar las puertas como Pedro por su casa.

Una de las primeras decisiones fue buscar a la bruja de cabecera de Matamba, que vivía en su tierra, en Nariño, pero ella también había huido. Aunque no tenía deudas con la justicia, se refugió en Venezuela. Cuando la ubicaron, la Policía, de la mano de la DEA, empezaron a hacerle seguimientos, y a intervenir sus comunicaciones para dar con el paradero del narco.

Cuenta uno de los hombres del grupo elite que se creó para cercar a Matamba que la bruja y el narco sabían que estaban en el radar, hablaban con cuidado. Acordaban los rezos, le enviaba con emisarios los elementos de “protección”, y así él se sentía seguro. Con lo que no contaba era que esa costumbre que lo hacía sentir inmune, en realidad, se había convertido en el anzuelo sin que ninguno de los dos supiera.

Los equipos de alta tecnología, para rastrear comunicaciones, que se usaron con apoyo de la DEA, fueron claves para determinar el lugar donde se encontraba Matamba. Lograron ubicarlo en el municipio de Bolívar, departamento de Santander.

Segundo paso

La relación de Matamba con su bruja de cabecera había dado buenas pistas para dar con el criminal, pero ya en territorio, era necesario encontrar exactamente en qué lugar de este municipio se encontraba. Hombres de inteligencia de este grupo élite fueron hasta allá para seguir las huellas y buscar información.

La recompensa fue la segunda clave para ponerle fin a la carrera criminal de este narco, nacido hace 42 años, en el Charco, Nariño. Camuflados entre la gente, sin despertar sospechas, los hombres del grupo élite empezaron averiguar por Matamba, y lograron dar con una persona dispuesta a entregarlo a cambio del jugoso pago de 2.000 millones.

SEMANA conoció que efectivamente hubo un soplón y que la recompensa se va a pagar.

Con su ubicación clara, se dio la hora cero, los hombres de la Policía llegaron a darle captura, pero Matamba no estaba dispuesto a ir a la cárcel nuevamente. Sabía que si caía, su destino, rápidamente, estaría en un penal de Estados Unidos a donde iba a ser extraditado cuando se voló de La Picota.

Se enfrentó a los hombres de la Policía y murió en este cruce, poniendo punto final a la carrera criminal. El operativo se dio con tanto hermetismo que, sin que se filtrara información, el encargado de anunciar el golpe fue el propio presidente de la República, Iván Duque, a través de su cuenta de twitter, en la que señaló que “quiero informarle al país que, en una operación de nuestra Policía, en coordinación con la Fiscalía, en Bolívar (Santander), fue neutralizado Juan Larinson Castro Estupiñán alias “Matamba”, excabecilla del “Clan del Golfo” y uno de los criminales más buscados del país”.